Propiedades antiparasitarias: se ha comprobado que el aceite del árbol del té ayuda a prevenir el contagio de piojos, incluso algunos estudios apuntan que podría utilizarse como repelente natural debido al aumento de resistencia contra los compuestos que tradicionalmente se han utilizado. Además otros estudios han demostrado que también es eficaz en el tratamiento contra otros parásitos oculares.

Propiedades antifúngicas: estudios científicos han demostrado que el Aceite del Árbol del Té es muy eficaz en el tratamiento contra infecciones producidas por hongos, dermatofitos y levaduras. En concreto se ha demostrado que previene y ayuda en el tratamiento contra la candidiasis producida por un crecimiento excesivo del hongo Candida albicans.

Propiedades antivirales: este producto es eficaz en el tratamiento del herpes simple. Además estudios científicos avalan su eficacia contra el Molusco contagioso, un virus muy extendido y muy molesto para los niños.

Propiedades antisépticas: se ha demostrado que es eficaz frente a la mayor parte de las bacterias que producen infecciones como pueden ser E. coli o S. aureus.